Una amistad a primera vista.

Allá por el mes de Julio nos presentaron .Yo aun era joven, pero con la ilusión no muy lejana de conocer la bella Asturias, la mágia de Gálicia y seguir conociendo lugares que llenaran mi recuerdo. Me pidieron consejo y en mi modesto entender aconseje lo mejor que pude. Mi nueva amiga estaba lleno de ilusión para ella todo era nuevo, acababa de nacer en este mundo. Un mundo tan apasionante según la mayoría y a la vez peligroso, según otros. Estos últimos no han podido sentir lo que este mundo te ofrece y tal vez por eso este sea su juicio. Ofrece amistad sin condiciones, libertad sin ataduras, sensaciones, olores, nuevas dimensiones, y como no, una forma de hacer degustaciones. Pero por encima de todo una forma de vivir y ver el mundo desde una lente diferente.
Pasó el tiempo y ella viajó por caminos en solitario, descubriendo metro a metro nuevos lugares y sensaciones. Se mojo con la lluvia de Jaén, el viento de Castilla le hizo escorar en su trayectoria sin perder su rumbo. Y cuando volvía a su lugar de descanso su ilusión era volver a empezar.
Un día, nerviosos e ilusionados empezamos camino juntos. Las tierras donde Alonso Quijano se enamoro de una bella mujer, llamada Aldonza Lorenzo, tierras de Gigantes y de personas nobles nos esperaban. Compartimos el viento, la niebla y un frió que en mi caso hizo saltar mi alarma por debajo de los 2 grados centigrados.
Despues de conocer esta tierra y de regreso a nuestro lugar de descanso una nueva cita surgió.
Esta vez seria tierra de amantes y cumbres nevadas. Aquí el camino era difícil y con pendientes, camino complicado para mi compañera de viaje, pero ella no me quería dejar solo y juntos alcanzamos la estrella.
Terminado este viaje surgió otro. Tierras de Lagunas y ríos. y después otro. Tierra de culturas que una vez se entendieron , tierra de caballeros y de personajes gloriosos, Abderráman II, Doménikos Theotokópoulos, Garcilaso de la Vega y muchos más que dejaron en sus calles estrechas y empedradas su pisar, así como nosotros en nuestro pasear dejamos recuerdos que no podremos olvidar.
Hemos viajado compartiendo viento, frio, calor, olores de invierno y de primavera y muchas más cosas que no se pueden expresar. Hemos compartido un sueño, que espero no pueda acabar. Gracias por haberte conocido, a tí que nacida en América y de nombre Harley, así te haces llamar.
Gracias amigos por compartir viaje, sonrisas, silencios y mucho mas.
¡¡¡¡ Gracias amigos ¡¡¡¡¡¡¡¡¡